Camilo, el de ojos verdes.

Los ojos verdes le daban miedo. No era un miedo infundado, era algo asentado en lo más profundo de su memoria. Ella no quería saber nada de esos ojos; sin embargo, la vida se empeñaba en propiciarle encuentros, de lo más variopintos, con ellos. Incluso antes de haber desarrollado su repulsión, recordaba haber tenido encuentros importantes con ojos verdes.

1. En su infancia, se había enamorado de un compañero de clase. Camilo, de ojos verdes, sonreía a través de las ventanas del salón y su cabello rubio brillaba con el sol de mediodía del trópico. Allí estaban unos de los primeros ojos verdes de su vida. Los recordaba cerquita el día en que, en medio de una tarde de piscina, Camilo la había besado por una apuesta con sus compañeros. Fue algo fugaz, todos reían alrededor, ella era la penitencia. Había regresado llorando a su casa, no quería ir al otro día al colegio, pero no podía decirle nada a nadie. 

A la mañana siguiente, llegó al salón y se sentó en las primeras filas, como siempre, su falda más larga de lo normal, sus medias más arriba de la rodilla y el cabello recogido en una cola de cabello alta, decorada con dos bolas de colores oscuros que combinaban con el uniforme. No le habló a nadie, se sentó y esperó a que empezara la clase. Salió al descanso y se fue al árbol de mangos, donde Jota tocaba canciones de rock en el violín. Se sentó a escucharlo y se fue calmando. 

Al regresar a su casa sonó el teléfono: era Camilo, nunca la llamaba. A la niña de 10 años se le hizo raro esa voz a través de la línea. Le pidió que escuchara dos canciones, que se las estaba dedicando y las puso a sonar a través de la llamada, no eran épocas de internet en las que fuera fácil buscar las canciones. Eran un vallenato y un reggaetón, ninguno de los dos géneros le gustaba ni un poquito, intentó concentrarse en la letra, agradeció el gesto y colgó. Ese día, Camilo dejó de gustarle, al año siguiente abandonó el colegio y escribió un poema de amor que luego presentaría como tarea para su nueva escuela. 

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